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Hemos tenido el placer de entrevistar a Alfredo Santos, Director General de búsqueda y selección en Hudson, empresa especializada en búsqueda, selección y gestión de talentos. Alfredo cuenta con más de 20 años de experiencia en la búsqueda de grandes talentos profesionales, un head hunter en toda  regla que conoce a fondo el perfil de los profesionales que buscan las grandes empresas. Así que no hemos perdido la oportunidad para realizarle unas preguntas sobre el chino mandarín y su situación actual en el mundo laboral.

27d2d9f1. Hace ya años se produjo un boom de emigración a China a ciudades como Beiging o Shanghay. Españoles que iban un poco más a la aventura a un país en el que apenas se hablaba inglés a trabajar en empresas españolas que se comenzaban a sentar ahí… De entonces a ahora, ¿ha cambiado algo el panorama?

 

Claro que ha cambiado. De echo, hoy China es un destino sumamente atractivo para el desarrollo profesional. No hay que olvidar que China es hoy la segunda economía del mundo, con la mayor tasa de crecimiento. Es muy complicado acceder a él para jóvenes titulados, pero no tanto así para los profesionales con una experiencia demostrable e interesante. En este mercado (Beijin y Shaghay) el mandarín sigue siendo el primer idioma, por lo que su dominio es un activo de inestimable valor.

 

2. ¿Sigue siendo China un país hacia donde hay que mirar?

 

China hoy más que nunca, es un lugar donde mirar, a pesar de ser la 2ª economía del mundo, es aún un país en vías de desarrollo. Por ello las oportunidades son inmensas.

 

3. De las personas que usted entrevista, ¿cuántos hablan chino mandarín?

 

Muy pocas personas hablan mandarín, e indudablemente esto es un freno. Sin duda el inglés ayuda en los negocios, pero insisto, nuestros datos son que en China el idioma principal para los negocios es el mandarín.

Además, no hay que centrarse únicamente en la barrera idiomática. Esta lleva siempre de la mano además una barrera cultural. Si coincido en la lengua, es más que probable que no tenga problemas con al cultura.

 

4. ¿Es un freno no hablarlo?

 

Quizás no debemos sólo hablar de frenos, sino de ventajas competitivas. Hablar mandarín, es y será una gran ventaja competitiva para un profesional. Pero a día de hoy, no hablar el idioma local, es el principal freno para un ejecutivo occidental en China.

 

6. Háblenos un poco de la situación del mercado laboral internacional hoy día y de los skills que se demandan…

 

Sin duda los skills más demandados ene estos mercados son:

  • Gran apertura mental
  • Capacidad de adaptación
  • Tolerancia a la diversidad
  • Enorme capacidad de trabajo y energía

 

7. La sensación es que en el futuro los perfiles profesionales tenderán más a:

Sin duda serán totalmente multiculturales.

 

8. Quienes tenemos hijos pequeños tal vez estemos un poco obsesionados con que nuestros hijos tengan una formación multilingüe… ¿es una preocupación con fundamento?

 

No lo vería como una preocupación, pero si como una necesidad indispensable para poder interactuar en un mundo global, y un mercado global. El idioma supone siempre la principal barrera.

 

9. ¿Cuáles son y serán los idiomas clave e imprescindibles?

 

El inglés seguirá siendo el idioma número uno. Pero el mandarín y el castellano, también serán fundamentales. Por último, quizás podríamos incluir también el árabe.

 

10. ¿Cree que, dado el crecimiento de empresas chinas asentadas en España, también pueda haber un nicho interesante para españoles en ellas siempre y cuando hablen el idioma?… O es cierta le leyenda que dice que los chinos sólo trabajan con chinos…

 

A pesar de la leyenda, creo que pocas culturas, con tanta tradición han demostrado que son capaces de trabajar en los 5 continentes, con todo tipo de sistemas políticos, económicos y religiosos.

Su cultura es muy fuerte, pero acepta en los negocios trabajar con otros mundos.

 

11. Si tuviera que dar un consejo a quienes leen nuestro blog, sería….

 

Que abran su mente aun mundo global y cambiante, aceptando que no sabemos lo que está por venir, y seguramente ni lo imaginamos; pero sólo con una certeza: todo estará entrelazado en el futuro